Nuestras guerreras. La selección femenina de fútbol.

Me hace bastante feliz, en estos tiempos de miseria, mal estar social y pesebrismo sin valores el reciente boom en los medios del deporte femenino. La cultura de lucha y esfuerzo que representan las mujeres resulta inspirador y como ya he expresado en otros artículos logra que vuelva a tener fe en el ser humano. Y por supuesto me produce una ilusión especial la versión femenina de mi deporte favorito, el fútbol.

La liga femenina me apasiona, pero me apasiona aún más la selección. Al estar menos enfocado al negocio, no como el fútbol masculino, se juega más limpio, sin la impronta masculina de dar patadas a los contrarios a las primeras de cambio. Esto es porque esas chicas que vemos en televisión aman el fútbol, como deporte y se les nota.

La selección española femenina de fútbol está formada por un gran grupo de jugadoras con muchísima calidad y valientes como ninguna otra selección. Han demostrado en este mundial de Francia de 2019 ser un equipo tremendamente competitivo que ha dejado marcado a fuego su nombre sobre la Torre Eiffel de París. 

Ayer jugamos contra EEUU, las vigentes campeonas. Jugadoras estas con una gran preparación física, rapidísimas y peligrosas. Se vio que las americanas ni son el "coco" ni por supuesto invencibles. Para nada. Se sabe que estos equipos que están acostumbrados a arrollar casi siempre, cuando las rivales les salen respondonas y le echan reaños al asunto, jugando bien, abierto y creando ocasiones, toman la vía del juego duro al límite del reglamento. Reglamento en el que es fácil sobrepasar las líneas marcadas cuando las decisiones están en manos de una "pajarraca" húngara y dos linieres con "miopía voluntaria".

Pues la "goleadora" de EEUU, muy rápida, no lo niego, si no llega a ser por los penaltis "se hubiese comido los mocos" ya que la seguridad que había en portería, efectividad defensiva no la dejaban cumplir sus propósitos. 

Resulta harto fácil arbitrar a favor de obra, a favor del favorito, por ello es importante recordar que las agresiones deben ser sancionadas con tarjeta roja y no con un intercambio de palabras por palmaditas en la espalda.

España está orgullosa de vosotras.

Por vuestra entrega en los balones divididos, por vuestra seriedad atrás, por vuestras rápidas entradas por las bandas, por vuestra calidad técnica, por vuestra lucha y por vuestro gol.

Ayer os pusieron todo en contra, pero partís de Francia con la dignidad intacta y creando mucha más afición . Segurísimo que habéis motivado a las jóvenes que en el futuro representarán a nuestro país. 

¡Sois muy grandes!

José Daniel Lloret Murillo

25 de Junio de 2019